La violencia de género deriva de un sistema económico que tiene fallas facilitando que los derechos de las personas sean limitados y no se garanticen, refirió Mario Cruz Martínez, académico de la Universidad Iberoamericana, en el inicio del quinto módulo del Diplomado de Especialización en Derecho de Género, en coordinación con el Centro de Estudios Sociales y Jurídicos del Sur de Europa.
En la sesión del pasado mes de mayo, el especialista consideró que entre las desigualdades estructurales que se viven en países latinoamericanos, se encuentran la pobreza, la falta de oportunidades a una educación que favorezca la competitividad laboral, un empleo mejor pagado y consecuentemente una mejor calidad de vida, elementos que generan violaciones a los Derechos Humanos.
Ante jueces, magistrados y colaboradores judiciales, el experto destacó que las naciones de América Latina enfrentan el reto de reducir las grandes brechas en lo que se refiere al acceso a derechos.
Como muestra, Cruz Martínez señaló que en la región surgen nuevos sujetos de derechos, tales como los jóvenes, la diversidad sexual o la interrupción legal del embarazo; pese a que ya existe un marco legal en algunas materias, al menos en México este aún se encuentra en sus primeras etapas de desarrollo dado que, por ejemplo, no existe una política pública del primer empleo.
Con este Diplomado se responde a la necesidad de contar con servidores públicos especializados en temas como Juzgar con perspectiva de género; se trata de una preparación académica semipresencial, integrada por nueve módulos, tres de ellos son presenciales y el resto en línea.
