El Tribunal de Tratamiento de Adi-cciones (TTA) del Poder Judicial del Estado de México celebró su décimo aniversario con una jornada de reflexión, destacando una década de ofrecer una segunda oportunidad a personas que, bajo el influjo de sustancias legales o ilegales, cometieron delitos no graves. Este tribunal ha rehabilitado e integrado a la sociedad a cientos de personas, demostrando que la justicia también puede ser restaurativa y humana.
El 17 de julio, durante la ceremonia, Ricardo Sodi Cuellar, titular del Poder Judicial del Estado de México, enfatizó el éxito de esta política pública, la cual ha evolucionado hacia una justicia más cercana y restaurativa.
“Tenemos que prevenir esa situación, tratar a las personas con un criterio diferenciado e impartir una justicia más humana. En un futuro, el derecho penal será cosa del pasado” expresó el Magistrado Presidente.
En el Aula Magna “Mgdo. Lic. Gustavo A. Barrera Graf” de la Escuela Judicial, Sodi Cuellar subrayó la importancia de prevenir la reincidencia, destacando que este tipo de programas abren una nueva perspectiva en la administración de justicia al enfocarse en las causas del delito.
Edna Escalante Ramírez, Consejera de la Judicatura resaltó la importancia de visualizar a los participantes de estos programas como personas con derecho a una nueva oportunidad de vida. “Es esencial reflexionar sobre la justicia restaurativa y terapéutica, y cómo esta puede beneficiar a la sociedad”, señaló.
En el marco de esta celebración, Olga Sánchez Cordero, senadora y ex ministra de la Suprema Corte, ofreció la conferencia magistral “La justicia que atiende las causas, restaura vidas, familias y el orden jurídico”. Destacó la necesidad de una reforma integral para enfrentar la criminalidad y las adicciones, y subrayó que la justicia terapéutica es fundamental en la transformación del sistema penal.
Por otro lado, Karelly Villanueva de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas de la OEA, y María Luisa Romero Rodríguez, asesora de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley de Estados Unidos, ofrecieron una visión internacional del TTA, destacando el impacto que ha tenido en el Estado de México en comparación con otras entidades.
Reflexionaron sobre el futuro de los tribunales
La jornada también incluyó una mesa de trabajo sobre los orígenes del TTA, en la que participaron destacadas magistradas como María del Refugio Elizabeth Rodríguez Colín y Cecilia Moreno Luna, quienes compartieron sus experiencias sobre la prevención del delito y la metodología del tribunal.
Al dictar la Conferencia “El futuro de los Tribunales de Tratamiento de Adicciones”, Escalante Ramírez puntualizó que en México apenas siete estados cuentan con un programa así y recordó que la justicia terapéutica surgió en los años 80 como una alternativa a los métodos tradicionales de justicia penal, enfatizando la rehabilitación y asignando al juez un papel activo en el tratamiento del transgresor.
En la recta final de la jornada, se desarrolló la mesa “Beneficios y Retos de los Tribunales de Tratamiento de Adicciones del Estado de México”, en la que participaron Elvira Díaz Salgado, Coordinadora General de Litigación de la Fiscalía General de Justicia; Ofelia Cruz Montañez, Fiscal Especializada en materia de Delitos Cometidos por Adolescentes y Alberto Cervantes Juárez, Director General del Instituto de la Defensoría Pública mexiquense.
Verónica Cortés Marroquín, Visitadora Auxiliar en Materia Penal del PJEdomex, destacó que todos los detalles del evento, incluyendo bocadillos, música de violín, reconocimientos y una exposición de pinturas, fueron obra de egresados del programa, demostrando así la efectividad de este enfoque rehabilitador.
Para cerrar con broche de oro, entre aplausos se presentaron cinco emotivos casos de éxito del TTA: Jonathan, Franco, Rogelio, Horacio y David, jóvenes que tuvieron la fuerza para cambiar y mejorar el rumbo de su vida y, tras varios años de haberse graduado mantienen su abstinencia a diversas sustancias psicoactivas, trabajan y se preparan para ser personas de bien.