De viva voz: Amnistía, una segunda oportunidad de vida

De viva voz: Amnistía, una segunda oportunidad de vida

Participé en la revisión de la Ley de Amnistía del Estado de México aprobada por la LX Legislatura mexiquense. Es una ley novedosa, pues se aparta del concepto tradicional y se ajusta a la realidad, al considerar un mayor catálogo de delitos, para que puedan acceder más personas privadas de su libertad.

Fui la primera en conceder una amnistía, a un joven del sur de la entidad, quien fue procesado por el delito de robo con violencia, sin lesiones. En menos de 20 días de ingresada su solicitud, se consideró procedente, se declaró extinguida la pena de prisión impuesta y cubierta la reparación del daño a la víctima.

Otorgar amnistía da una gran satisfacción, es abrir una puerta de oportunidades, porque estamos rescatando a una o a varias personas que quizás cometieron un error, pero que se están arrepintiendo. Es una felicidad compartida, una emoción porque estamos cambiando vidas y una satisfacción que no podría describir. 

Es un trabajo en conjunto que está realizando el PJEdomex, con la Defensoría Pública, la Fiscalía General y la Dirección General de Prevención para que la Ley de Amnistía sea una realidad. Vamos por más resultados positivos, que la sociedad tenga confianza. 

De acuerdo a las variantes o hipótesis que los propios legisladores autorizaron, pueden acceder a la amnistía quienes cometieron el delito de robo con violencia, pero que no haya dejado lesiones a la víctima, ni causado por arma de fuego, evidentemente que haya pagado la reparación del daño, que no sea servidor público, que sea primodelincuente, que no haya sido sentenciado con anterioridad por diverso delito y que actualmente no cuente con una investigación, proceso o sentencia pendiente que cumplir.

Hay una ley de amnistía a nivel federal que fue publicada el año pasado y la Ley del Estado de México.La primera es para delitos del orden federal y está muy restringido su acceso, tan es así, que han sido pocos los candidatos que se han beneficiado.


Para enterar a las Personas Privadas de la Libertad PPL´s que no sabían de qué se trata la Ley de Amnistía, fuimos proactivos y al encuentro de la gente. Muchos, cuando llegan al proceso de ejecución de sentencias ya vienen abandonados, incluso de sus defensas particulares, ya agotaron todos los recursos de la familia, y no están dispuestos a poner en riesgo algo más, entonces se quedan inactivos, muy quietos.

Antes de que se emitieran los lineamientos para darle trámite a las solicitudes, aprovechamos para hacer jornadas de información al interior del penal, tuvimos entrevistas con las PPL´s, porque muchos creen que todos tienen derecho a la amnistía y no es así, el  Artículo 4to de la ley dice cuáles son los supuestos específicos y remarca en cuáles no habrá forma de conceder el beneficio. 

A los que no pueden acceder a la amnistía, les informamos qué otro tipo de beneficio pueden tener, qué sustitutivo, sobre todo los invitamos a que accionen, los motivamos a que despierten y se muevan. Hay que hacer las cosas para hoy y no dejar nada para mañana. 

Los trámites para la Ley de Amnistía son completamente gratuitos e interinstitucionales. Queremos hacer el procedimiento lo mas ágil posible para que se haga efectivo, de nada sirve una ley sino se puede acceder a ella.

Las solicitudes nos llegan en un papelito, y nos dicen “quiero mi amnistía” soy fulanito, lo único que hacemos es darle la formalidad para que se sientan protegidos, defendidos y atendidos. Solicitamos la intervención de la Defensoría Pública y han accedido muchísimo, inclusive en tiempos de pandemia, hubo una comisión extraordinaria de defensores para que pudieran atender.

Es un derecho que ya ganaron, tenemos todas las herramientas y la información necesaria para decir sí corresponde y te vas o simplemente negar, no con el afán de destruirle la vida a alguien, sabes qué, no cabes en la amnistía, las hipótesis de los supuestos están muy cerradas, pero tienes derecho a otros beneficios, no apagar el sueño de la libertad. 

Hemos hecho cuatro entregas en bloque, por la agilidad que se la ha dado al trámite. El Centro penitenciario de Cuautitlán es pequeño pero tiene una movilidad muy grande, porque no puede concentrar tanta gente, hay mucho ingreso pero también salidas y traslados. Además, en diversas ocasiones, las penas no permiten conceder beneficios fácilmente porque son muy altas y delitos muy violentos. 

Esto que nosotros utilizamos como herramienta se le llamó plan piloto, porque decidimos resolver en bloque, haciendo ceremonias. Ha servido y motivado a otros centros y juzgados, realmente lo que nos planteamos es resolver lo más pronto posible.

Tenemos 106 resoluciones emitidas, 102 han sido concedidas y las otras se han negado porque no han cumplido algún requisito, pero eso no impide que si lo cubren, puedan presentar nuevamente su solicitud y acceder a la amnistía.     

“La Ley de Amnistía no está liberando a delincuentes para que sigan delinquiendo, tengan la seguridad de que los jueces están haciendo lo necesario, para verificar que las personas que obtienen la libertad, sean realmente las que cumplen con los requisitos”, que sepan las víctimas que en ningún momento se les va a dejar desprotegidos, antes de que pueda proceder cualquier amnistía, que se repare el daño, que no haya cuentas ni deudas pendientes con nadie de los agraviados. Los lineamientos que ha dictado el PJEdomex garantizan a la sociedad que se van a ir en libertad, los que deban irse. A nadie se le está permitiendo una salida ilegal e ilegítima, no se están haciendo trámites en lo oscuro.


Cuando se les otorga la amnistía, tienen esa oportunidad de volver a empezar, de poder llegar con su familia, de abrazarlos, de buscar un trabajo porque ya no tienen ningún antecedente, pueden iniciar nuevamente y aprovechar este beneficio, la verdad es que su vida tiene que ser encaminada diferente y redireccionarla, irse por una senda que sea satisfactoria para ellos y su familia.   

Como juzgadores es muy gratificante poder otorgar esa libertad, pues existe una ley que tenemos que explotar al máximo. En el juzgado damos celeridad, los motivamos para que realicen su solicitud, promuevan, obtengan esa libertad y encausen sus vidas.

Es una ley muy benéfica, ojalá los que tienen esa oportunidad la aprovechen y puedan obtener su libertad, de esta manera regeneramos el tejido social que se rompe, primero por la comisión del delito y después, por tener a una persona detenida, que puede salir y ser productiva.

Creo que como todas las leyes, cuando se van a aplicar en un principio, el primer acto que sale en acatamiento nos cuesta un poco de trabajo, armar la resolución, qué es lo que tenemos que tomar en consideración, que no se nos pase nada de lo que establece la ley. Después todo fluye muy rápido, porque en el caso de la amnistía, es un día de vida de las personas, no podemos retrasarnos, no podemos decir mañana resuelvo, mañana te digo qué se va a hacer.

Las instituciones han respondido muy rápido, el personal del juzgado es muy trabajador, los jueces por sí solos no lo lograríamos; sin embargo, la labor en equipo, ha permitido que esa noche, muchas personas duerman en su casa y con su familia.

Me impactó un asunto de un robo con violencia, robó 49 pesos y lo condenaron en procedimiento abreviado a 5 años 8 meses de prisión, ni siquiera llevaba un arma, amenazó haciendo la finta que llevaba un cuchillo y fue condenado. 

Dices no es posible, cómo una persona permanece tanto tiempo privado de la libertad. Fue un asunto que cuando vi dije él tiene que salir ya, cuánto tiempo lleva por una cantidad que además se recuperó porque lo detuvieron metros adelante. Se tiene que ir lo más rápido posible, puede acceder a la amnistía, no es justo que haya estado tanto tiempo, pero es la ley, se aplicó la ley, la pena mínima. Como este caso, debe haber muchos en el país. Asi es la ley, por lo que la prevención del delito es fundamental

Quiero exhortar a la población, si ven la mínima posibilidad de que las personas puedan acceder a la Ley de Amnistía, las encaucen, se acerquen a jueces, defensores, ministerios públicos y promuevan, porque es una manera de poder salir y tener otra vida, es una forma de despresurizar un poco los centros penitenciarios.

Yo por la Justicia

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