El Poder Judicial del Estado de México continúa innovando la forma de impartir justicia en la entidad, pues por primera vez y en un hecho sin precedente, el Tribunal Superior de Justicia llevó a cabo un círculo de sentencia resultado del proceso de justicia restaurativa con participación de una adolescente.
Las magistradas de la Sala Familiar de Toluca, Patricia Lucía Martínez Esparza, María Cristina Miranda Cruz y Ana Rosa Miranda Nava, lograron que una familia de padres separados acordará el pago de pensión alimenticia en beneficio de su hija, a través de un círculo derivado de un proceso realizado en el Centro Estatal de Mediación, Conciliación y Justicia Restaurativa y que tuvo carácter de sentencia de Segunda Instancia.
Con la apoyo de los mediadores Guillermo Martínez, Socorro Nava y Mildred Ayala, la adolescente superó el sentimiento de culpabilidad por la nula comunicación entre sus padres para atender sus necesidades y se sanaron las heridas familiares.
En la sesión final, la familia acordó los parámetros de convivencia y de pensión económica que el padre pagará mensualmente a su hija para su manutención y para el apoyo de actividades deportivas que realiza dentro y fuera de la entidad.
A nombre del Consejo de la Judicatura del Estado de México, el consejero Marco Antonio Morales Gómez destacó que con este tipo de sentencias, el Tribunal Superior de Justicia mexiquense refrenda su compromiso social y la calidad humana de las actuaciones de los juzgadores, ya que impactan directamente en las familias para su beneficio.
La magistrada Miranda Cruz resaltó la calidad multidisciplinaria del grupo que participó en el círculo restaurativo, pues se involucraron abogados, psicólogos, mediadores, facilitadores y las propias juzgadoras; además señaló que se trata de un proyecto novedoso de impartición de justicia que no tiene similar en todo el país.
Por su parte, la magistrada Martínez Esparza aseguró que el Poder Judicial de la entidad, no sólo aplica la ley desde la perspectiva jurídica, sino también desde un punto de vista humano, pues mediante el círculo de sentencia la solución a los conflictos la encuentran las personas que están inmiscuidas, a la par de que demuestra la sensibilidad de los juzgadores.
Al respecto, la magistrada Miranda Nava exhortó a la familia a continuar su relación, pues pese a la separación, el vínculo filial persiste en el tiempo; además, en el futuro este acuerdo y la disposición que tuvieron sus integrantes para dialogar será un ejemplo de vida.
El director del Centro Regional de Mediación en Toluca, Mario Alberto Montaño Delgado indicó que la mejor impartición de justicia es la que se hace sin coaccionar, por lo que celebró que este tipo de sentencias se concreten en el Tribunal mexiquense, siempre trabajando en equipo.