Sofía Sodi Zapfe
¿Qué pasaría si nos uniéramos todos por una misma causa?
Esta fue la pregunta que le hice a mi equipo de trabajo cuando llegué al Voluntariado en 2022. Todos los inicios causan incertidumbre ¿Qué vamos a hacer y cómo le vamos a hacer? Eran las preguntas que navegaban en mi mente en mi inicio en la ayuda voluntaria.
Camino que llenaba mi tiempo, ahora llena mi vida
Antes de ingresar al Voluntariado, me desempeñé como abogada litigante en materia penal y de propiedad intelectual. Además soy una abogada artista, pues una de mis grandes pasiones es el arte en todas sus manifestaciones, principalmente en las artes visuales.
En enero de 2022 asumí la coordinación del Voluntariado, con el respaldo del Magistrado Presidente Ricardo Sodi Cuellar y por supuesto de la Presidenta del Voluntariado, la Licenciada Jacqueline Zapfe Jiménez.
Al planear y ejecutar las primeras actividades poco a poco me di cuenta que “ayudar no es fácil” porque se trabaja con niñas, niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad, mujeres violentadas, adultos mayores, migrantes, entre otros sectores menos favorecidos. Para ayudar se requiere de mucha sensibilidad, empatía, prudencia y tiempo, pero, sobre todo de VOLUNTAD.
Mi trabajo inicia con la planeación, organización y logística de proyectos sociales, ejecución de programas académicos, promoción de acciones para beneficiar a la familia judicial y por supuesto, la procuración y optimización de fondos.
Se extiende también en compartir tiempo con niñas y niños víctimas de algún delito y enfermos, así como quienes viven en casas hogar o están pasando por un procedimiento de guarda, custodia y convivencia familiar.
Para mí generar una sonrisa no sólo consiste en donar un juguete sino complementar la experiencia con una actividad artística o lúdica. Es así que hemos impartido clases de pintura en casas hogar, clases de elaboración de títeres, llevado al cine y a la playa a niños que no lo conocían, compartido una lectura, disfrutado de un día de actividades al aire libre, hasta celebrado una tradicional posada.
Para el Voluntariado de la administración 2020-2025 ha sido un periodo de mucha actividad y grandes logros, que nos han hecho crecer en beneficio de comunidades, grupos vulnerables y de la familia judicial.
¿Qué es un voluntario?
Una persona que dedica su tiempo, corazón, talento y esfuerzo en beneficio de alguien más.
Hay diferentes tipos de voluntariados desde los religiosos, corporativos e institucionales. No necesitas irte al otro lado del mundo para ayudar, puedes empezar desde tu comunidad.
Haz un cambio, por más pequeño que sea, desde hacer limpieza de tu closet y donar la ropa, hasta dedicar tiempo y esfuerzo para construir un aula.
Voluntariado del PJEdomex cumplió ya 34 años
Como institución, en 1990 durante la administración del Magistrado Presidente, José Colón Morán, se creó un área solidaria y de ayuda voluntaria que cuenta ya con 34 años de vida.
El corazón del Voluntariado se ha fortalecido gracias a las manos solidarias y activas de sus presidentas, coordinadores y por supuesto, del gran equipo de trabajo que día a día centran sus esfuerzos en mejorar los procesos y perfeccionar los proyectos.
En el Voluntariado, el bienestar de niñas y niños mexiquenses en situación de vulnerabilidad nos motiva día a día, por lo que una de las principales actividades es nuestra tradicional colecta de juguetes, a través de las donaciones de colaboradores de todos los distritos judiciales hemos generado sonrisas en niñas, niños y adolescentes de:
- Albergues del DIF Estado de México
- Casas hogar
- Refugios de la Secretaría de las Mujeres
- Fundaciones de pacientes con cáncer y con discapacidad visual
- Comisión de Atención a Víctimas del Estado de México
- Hospital materno infantil del ISSEMYM
- Juzgado de Adopciones
La misión del Voluntariado es responsabilidad social, por ello, gracias a las manos voluntarias de colaboradores judiciales, llevamos a cabo en 2022 la construcción de una casa en beneficio de la familia Calixto Bermúdez de la comunidad Pedro Arriba, municipio de Temoaya.
En 2023 construimos un aula escolar y equipamos un aula medios de una primaria de Santiago Tianguistenco, brindando mejores oportunidades de aprendizaje a 300 niñas y niños. Lo que se logró gracias a la rifa con causa, que fue nuestra principal fuente de recaudación de fondos.
La energía del Voluntariado es tan grande que se extiende a otros lugares en los momentos más sensibles, como lo fue el paso del huracán Otis por Guerrero, a donde llevamos tres toneladas de víveres y láminas galvanizadas para la reconstrucción de viviendas, a la sede del Tribunal Superior de Justicia en Chilpancingo, como muestra de solidaridad y empatía.
Uno de los principales objetivos del Voluntariado es velar por el bienestar de todas y todos los que pertenecemos a esta institución, integrada por cerca de 6 mil servidoras y servidores judiciales, con quienes nos hemos solidarizado, muestra de ello son las donaciones de sillas de ruedas, para beneficiar a familiares de nuestros colaboradores.
En el Voluntariado nos preocupamos por la integración y el esparcimiento familiar. Por ello incorporamos a las y los hijos de nuestros compañeros al programa, los más pequeños en reciclarte, actividad lúdica y artística para promover el cuidado del medio ambiente; los adolescentes y jóvenes en el taller de debate para fortalecer sus habilidades de comunicación y pensamiento crítico.
Para nosotros la capacitación de nuestras voluntarias es importante, por lo que permanentemente promovemos diplomados en arte, desarrollo humano e historia de México.
Rodéate de un buen equipo
Siempre que alguien me pide un consejo sobre mi trabajo respondo “Rodéate de un buen equipo de trabajo” profesionales comprometidos cada uno con su cometido, que te reten, te respalden y te cobijen.
Gracias Gaby, Lupita, Paty y Julio
El Voluntariado es trabajo en equipo que te enriquece como persona y profesional, te da perspectivas que quizá nunca hubieras imaginado, fomenta un sentido de lealtad hacia el objetivo en común y ahí está la clave, que todos rememos en la misma dirección.
En el camino de la ayuda voluntaria siempre hay dificultades, ojalá todo fuera color de rosa, pero no es así. La frustración, la apatía, la desmotivación y por supuesto la falta de equipo y de fondos siempre significarán piedras en el camino.
Aprende a transformarlas en escalones, cuestiónate: ¿Qué más puedes hacer? ¿Cómo lo puedes hacer? ¿Con la ayuda de quién? Nunca es tarde para aprender el uno del otro.
Creo firmemente que un trabajo en red hace que las cosas prosperen, el conocer a personas que comparten los mismos intereses te ayuda a crecer, por lo que el compartir ideas y procesos también hace que se consoliden las acciones.
Es difícil, hay que dejar siempre al ego sentado en la sala de tu casa, comiéndose unas galletas mientras te vas a trabajar. En la ayuda voluntaria no hay que esperar el agradecimiento, el premio o las fotografías, sino el impacto positivo de tu labor en la vida de los demás.
Nadie es tu competencia, nadie va a llegar primero que tú. Nadie puede ganarte porque la ayuda altruista no es una competencia, sino un viaje en el que cada persona tiene su propia misión.
Recuerda que un verdadero acto de generosidad, siempre va a desencadenar otro más grande.